Seguimos con los desayunos...

... pero esta vez no fue en casa!
Hace tiempo que quería ir a Le Pain Quotidien, la primera sucursal en Argentina de una cadena belga que se especializa en hacer sus propios panes (Y sí.. a mi me dicen PAN y tengo que probar!). Además no se si fueron los que introdujeron el temita de las mesas comunales... Pero aparentemente es algo que también los caracteriza.  A mi mucho no me gusta! Igual nosotros nos sentamos en una mesa muy linda pero común... por suerte también había! Je!

El estilo de los panes que ofrecen es el europeo, muy diferente a los que estamos acostumbrados acá... son de un gusto intenso, tirando a ácido, con la corteza crocante y la miga aireada.  Esto es porque no se hace con levadura, sino con masa madre.  En otro post ya había hablado de esto, porque los panes de L'épi son similares. A mi me gustan mucho!

De todas formas, lo que más me copo de este lugar fueron los detalles... En todas las mesas hay un molinillo con sal marina y otro con pimienta y aceite de oliva... Todo acá es órganico, eso me encanta!

Yo me pedí el desayuno orgánico que venía con el infaltable (para mí) café con leche, un croissant de almendras (no le saqué foto porque lo doné, ja!), jugo de naranja y una canastita con distintos tipos de panes... Lo lindo es que no te traen una porción miserable de mermelada y tenes que andar racionando para que te alcances! No, no... traen tres frascos, uno con dulce de leche y dos mermeladas muy ricas.  Así... del frasco a tu pan, como en casa! 
Lo que no me copo tanto, es que los panes no estuvieran tostados y que la taza de café con leche no tenía asas! Pero eso ni cuenta... son formas! 

Una última snobeada! Cuando viaje a París, había un lugar muy lindo a la vuelta del hotel.  Yo todas las mañanas antes de arrancar, pasaba por ahí a pedir mi caféole (o cafe au lait, una de las pocas cosas que decía en francés... ja!).  Una tarde, no había comido nada en todo el día y entré... me pedí un Tartine Camembert Bio & Noix, en criollo, pan con queso! Y en lenguaje de señas la chica que atendía me ofreció ponerle miel por arriba...  Fue una de las cosas mas simples y ricas que comí en el viaje... Y recién hoy relacioné que era éste lugar! Se ve que había quedado dando vueltas por mi cabeza... Por este recuerdo y porque me encantó el de acá, voy a volver y seré croissant...